La Navidad ya ha llegado a su fin. Atrás quedan las reuniones familiares, las comilonas y los regalos de los Reyes Magos. Días realmente divertidos y llenos de risas pero que pueden acabar dejando nuestra casa hecha un caos cuando hemos sido los anfitriones. En estos casos seguimos teniendo las fiestas muy presentes, ya que toca ponerse a limpiar y restablecer el orden habitual perdido por las diferentes celebraciones en lo que un día fue tu bonita casa.
Obviamente, a nadie le gusta hacerlo y la cantidad de tareas por hacer puede llegar a resultar abrumadora. Sin embargo, no hay motivo para volverse loco. A continuación te damos algunos consejos para abordar la limpieza integral de la casa después de Navidad y dejarla como los chorros de oro.
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Es el primer paso por el que debemos comenzar. Quita todos los elementos de la decoración navideña y mételos en cajas por separado con mucho cuidado para que el año que viene cuando vuelvas a abrirlas todo esté en perfectas condiciones y puedas volver a usarlos. Además, es importante que almacenes las cajas en un lugar seco para evitar que los adornos cojan humedad y se estropeen.
Ordenar la casa
Aprovecha que has quitado los adornos navideños y que hemos entrado a un nuevo año para darle un lavado de cara a tu hogar. Es un buen momento para deshacerse de todos aquellos elementos que no aportan nada a la decoración de tu casa y limpiar aquellas zonas que tenías olvidadas. De esta forma, verás tu casa desde otra perspectiva y puede que descubras nuevas posibilidades que no habías tenido en cuenta. La idea es ver en la limpieza de la casa una nueva oportunidad de redescubrir tu hogar. ¿Acaso no nos gusta a todos vivir en una casa bonita y bien ordenada?
Limpiar las manchas de los textiles
En las comidas y cenas de Navidad suelen reunirse muchas personas, por lo que es casi imposible que no se manchen las alfombras, los manteles o las sillas de líquidos y restos de comida. No desesperes. Puedes recuperar el aspecto original de tus tejidos y conseguir que luzcan como nuevos con un poco de bicarbonato. Únicamente tienes que dejar que actúe durante varias horas para ver como la suciedad se esfuma.
Limpiar las ventanas
La limpieza de las ventanas suele ser una de las tareas que más postergamos. Ni que decir tiene que después de Navidad es mucho peor, sobre todo si las hemos decorado con nieve artificial. Uno de los mejores trucos para ahorrar tiempo en la limpieza de las ventanas y que ofrece resultados increíbles es mojar los cristales con agua caliente, echar limpiacristales y dejar reposar unos segundos. Después, solamente tienes que pasar una espátula para eliminar los restos.
